señor del desvelo
aquí estoy
soy la que merodea la noche
tecleando
a la hora del silencio
el tiempo se llena de palabras
comparte embriagueces del alma
se hunde
y retoma momentos
en una fotografía que se ha amarilleado
las cosas estallan entonces su lamento visceral
las sillas el cansancio
las bibliotecas tanto agobio
y a veces se hace escuchar
la protesta obstinada de alguna canilla
mudos compañeros
que se rebelan a esa hora
cuando el señor del desvelo se adueña
de todo
y yo, como el tiempo, me lleno de palabras